Devocional 15 ene. - Lord Kinloch

Los muchachos de la plaza

Lucas 7:32 Semejantes son a los muchachos sentados en la plaza, que dan voces unos a otros y dicen: Os tocamos flauta, y no bailasteis; os endechamos, y no llorasteis. 

Aquí tenemos otra de las ilustraciones cotidianas de Jesús, que es poderosa por medio de su misma cotidianeidad. Al hacer referencia a los muchachos de la plaza, que no podían estimular a sus compañeros a estar alegres o lamentarse con ellos, Cristo reprueba la inconsistencia de aquellos que no ceden ante Dios, sea cual sea la manera en la que Él trate con ellos.

Es el mismo pecado que cometemos cuando nos mantenemos en un estado de ánimo orgulloso u hosco, sea cual sea el tono en el que Dios nos aborde, y nos negamos a adaptarnos a sus dispensaciones, ya sean gozosas o tristes. Verdaderamente somos entonces como los muchachos en la plaza. 

Señor Jesús, que me hablas continuamente con distintos acentos de ternura, que te esfuerzas por llevarme hacia ti tanto por el gozo como por la tristeza, no permitas que, como un muchacho caprichoso, me niegue a escuchar tu voz sea cual sea el tono en que me abordes, e inclíname a tu voluntad de tal forma que directamente me adapte a tus tratos, para alabanza de tu efectiva gracia. 

Lord Kinloch