Devocional 20 nov. – Lord Kinloch

El poder de Jesús

Juan 18:6 Cuando les dijo: Yo soy, retrocedieron, y cayeron a tierra.

Así sucedió con aquellos que fueron enviados a arrestar a Jesús. Era necesario que sucediese esto para demostrar que Él se sometió a sus sufrimientos de manera enteramente voluntaria, restringiendo la omnipotencia que podía haber aplastado a sus oponentes al instante.

También muestra como los seres humanos se esfuerza perversamente en contra de Dios y, por así decirlo, fuerzan al Todopoderoso a condenarlos a pesar de la resistencia de su gracia. Mejor les sería retroceder y caer a tierra, a los pies de Cristo.

Señor; cuando los hombres vinieron a arrestarte, pudiste hacer caer al suelo a tus enemigos con una voz de tus labios, pero te entregaste voluntariamente a sus manos. Te pido humildemente que me enseñes a percibir de manera tan plena el poder de tu deidad que yo me rinda implícitamente  a los propósitos de tu gracia, para alabanza de tu santo Nombre.

Lord Kinloch