La salvaciòn.

La Salvación

Jn.3:3  Respondió Jesús y le dijo: De cierto, de cierto te digo, que el que no naciere de nuevo, no puede ver el reino de Dios.

La doctrina de la salvación, conocida como soteriología en la teología cristiana, es un aspecto fundamental de la fe cristiana que se centra en la redención y reconciliación del ser humano con Dios. Esta doctrina es rica y compleja, a continuacion se enumeran los principales componentes de la doctrina de la salvación:

1.- Naturaleza del Pecado y la Necesidad de Salvación:

La doctrina de la salvación parte de la premisa de que el pecado es una realidad en la vida de los seres humanos. El pecado se entiende como la transgresión de la voluntad de Dios y como una barrera que separa al individuo de una relación correcta con Dios. En esta perspectiva,  todos los seres humanos son pecadores por naturaleza, y el pecado tiene consecuencias espirituales y morales. (Ro.5.12; Ro.6.23; Gén 6:5; Stg_1:13-15; Jer.17:9-10; Mt.12:34-35; Mt.15:18-19; Mr.7:21; Lc.6:45; Ef. 4:17-19; Ro.1:21-28)

 2.- Gracia Divina:

Un concepto fundamental en la doctrina de la salvación es la gracia divina. Los cristianos creemos que Dios, por su amor inmerecido y favor, ofrece la salvación como un regalo gratuito a la humanidad. La salvación no se puede obtener a través de méritos personales o buenas obras; es un regalo otorgado por la misericordia de Dios. (Miqueas 7:18-19; Tit.2:11; 2Ti.1:9;  Ef.4:7; Ef.2:8; Ef.1:7; Gál.1:15; Ro.5:21; Ro.3:24; Ose.14:4; Ef.2.14))

3.- Fe en Jesucristo:

La fe en Jesucristo es esencial en la doctrina de la salvación. Los cristianos creemos que Jesucristo es el Salvador y el mediador entre Dios y la humanidad. Ademas creemos en la obra redentora de Jesús, incluyendo su muerte en la cruz y su resurrección, son el eje central en la salvación. Ademàs Jesucristo pagó el precio por los pecados de la humanidad y, a través de la fe en Él, los seres humanos son llamados a ser reconciliados con Dios.(Jn 3.3-8; 1 Jn5:4; 2 Co.5:7; 2 Ti.4:7-8; 1 Pe.1:8-9; 1 Co.13:2; Ro.10.8-9; 1 Jn.5:5; Heb.11:6; Jn.11:25-26)  

 4.- Arrepentimiento:

El arrepentimiento es otro componente importante en la doctrina de la salvación. Implica un cambio de corazón y mente, así como el abandono de los pecados. Para el cristiano, el arrepentimiento es un paso necesario en el proceso de salvación, ya que implica un reconocimiento sincero del pecado y un deseo genuino de volver a Dios.  (Mt.4:17; Lc.5:32; Lc.24:47; 2 Crón.7:14; 1Jn.1:9; Prov.28:13; 2 Crón.30:9; Mt.3:8; 2Pe.3:9; Mt.9:13; Joel 2:13; Ezequiel 18:32)

 5.- Bautismo:

El bautismo es un sacramento que simboliza la unión con Cristo y la purificación del pecado. Tambien implica la entrada en la comunidad de creyentes y la iniciación en la fe cristiana.( Gál.3:26-27; Mt.28:19-20; Jn.3:5; Ro.6:3; 1 Cor.12:13; Jn.1:33; Tit.3:5)

 6.- Vida Transformada:

Esta doctrina también enfatiza que la salvación no es solo un evento único, sino un proceso continuo de transformación espiritual. Los creyentes perseveran en vivir de acuerdo con los principios y valores cristianos, tratando de ser más semejantes a Cristo en sus vidas diarias. Esta transformación se considera como evidencia de una fe genuina. (2Co.3:18; Ro.12:2; 2 Tes.3:5; Gàl.5.22-23; Colos.3:5; Hec.3:19; Colos.3:9-10)

7.- Vida Eterna:

La doctrina de la salvación incluye la esperanza en la vida eterna. Los cristianos creemos que que al ser salvos por gracia a través de Jesucristo, disfrutaremos de una vida eterna en la presencia de Dios después de la muerte, en la que no habrá más sufrimiento ni separación de Dios.(Jn.10:28-30; Prov,8:35; 1Jn.2:17; 1Pe.5:10; 1Jn.5:11;  2Cor.4:18; Juan 3:16; 1Jn. 5:13; Sal.139:23-24;  Jn.17:3; Ro.6:23)

La doctrina de la salvación se centra en la persona y obra de Jesucristo y cómo se hace posible la salvación espiritual en Él, creyendo que su sacrificio sustituye el castigo personal por el pecado (muerte), lo que implica un arrepentimiento y una vida transformada a la voluntad de Dios.