Devocional 08 Mar – Alexander Smellie

DAR

Hechos 20:35 En todo os he enseñado que, trabajando así, se debe ayudar a los necesitados, y recordar las palabras del Señor Jesús, que dijo: Más bienaventurado es dar que recibir.

Mas bienaventurado es dar que recibir. Este es un dicho del Señor, y deben haber muchos dichos como este en la biblia, que aun los evangelios no registran en ninguna de sus páginas.

Es más bienaventurado porque es bueno hacerlo. Dios siempre está dando. Lluvia, rocío y luz del sol, vida y salud, la disciplina de la enfermedad y la corrección de la tristeza, y, lo mejor de todo, dio a su propio y querido Hijo y todo lo que trae Jesús. ¡Cómo nos ama al derramar su gran tesoro a nuestro corazón! No existen límites a su generosidad. Si doy, me acerco mas a Èl

Es más bienaventurado porque da más fruto. Son aquellos que dan, sea dinero, tiempo,  trabajo y a sí mismos, quienes son los benefactores y salvadores del mundo. El alma egoísta nunca bendice a aquellos que están a su alrededor. Solo lo hace el alma que se olvida de sí misma. Así que debo dar si no quiero que mi vida sea estéril y vacìa, sin propòsito en este mundo.

Es mas bienaventurado, porque es la consecuencia y consumación del recibir. Primero recibo, luego doy. Recibo a Cristo y su salvación con manos vacías, con corazón necesitado, y luego, habiéndome enriquecido, reparto mi riqueza y tesoro a otros. Soy amado divinamente, de una manera que no se puede expresar con palabras, para poder aprender a amar. El recibir es un preludio;: el dar es el resultado y la corona. El recibir es el camino, el dar es el objetivo.

Señor que recordemos y obedezcamos tus palabras. Que agradezcamos a Pablo, que preservó para nosotros los dichos del Maestro, que no se encuentran en los mismos evangelios.

Alexander Smellie