Devocional 08 feb. – Lord Kinloch
El nuevo nacimiento
Juan 3:3 Respondió Jesús y le dijo: De cierto, de cierto te digo, que el que no naciere de nuevo, no puede ver el reino de Dios.
No es de extrañar que estas palabras de Cristo
produjeran dificultades e incredulidad en la mente de Nicodemo. El nuevo
nacimiento es algo misterioso, incluso para el creyente que lo sostiene. «El
viento», dice Cristo, «sopla de donde quiere, y oyes su sonido; mas ni sabes de
dónde viene, ni a dónde va; así es todo aquel que es nacido del Espíritu».
Sin embargo, la regeneración de la naturaleza
corrompida del hombre por el Espíritu de Dios que habita en Él es una gran
realidad, y, sin ella, nos dice Cristo, nadie puede entrar al reino de Dios.
«el que no naciere de nuevo, no puede ver el reino de Dios».
Mi Señor, lleno de gracia, que enseñas a aquellos que
vienen a ti en oscuridad, los misterios de tu evangelio, agrádate te ruego en
concederme el nuevo nacimiento sin el cual no puedo entrar a tu reino, y
concede que, regenerado por tu gracia, me convierta en alguien adecuado para tu
gloria, para alabanza de tu Espíritu que habita en nosotros.
Lord Kinloch
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