Devocional 04 nov. – J. R. Miller

Maná secreto

Juan 4:34 Jesús les dijo: Mi comida es que haga la voluntad del que me envió, y que acabe su obra.

La vida halla su verdadero alimento en hacer la voluntad de Dios. Jesús enseñó la misma verdad cuando fue tentado a convertir las piedras en pan. Él dijo en Mateo 4:4 «no sólo de pan vivirá el hombre».

En esta ocasión, los discípulos lo habían dejado hambriento al lado de un pozo. Al volver, se encontraron con que no necesitaba comida, y Él lo explicó diciendo: «Mi comida es que haga la voluntad del que me envió». Jesús había estado alimentando un alma hambrienta, y eso había alimentado su propia hambre.

El secreto para una vida espiritual bien alimentada es la obediencia y el servicio. El pecado nunca satisface porque es desobediencia. El egoísmo nunca satisface, porque sólo el que ama vive, y el amor no busca lo suyo, sino siempre lo de la otra persona. Si hacemos la voluntad de Dios, hallaremos alimento para nuestras almas en cada obediencia y cada sacrificio de amor. Si queremos aprender el secreto de vivir sin cansancio, hemos de aprender a hacer la voluntad de Dios. Ese es el maná secreto que nutre a todos los que comen de él.

J. R. Miller