Hageo 1

    Obedecer a Dios

Hag 1:14  Y despertó Jehová el espíritu de Zorobabel hijo de Salatiel, gobernador de Judá, y el espíritu de Josué hijo de Josadac, sumo sacerdote, y el espíritu de todo el resto del pueblo; y vinieron y trabajaron en la casa de Jehová de los ejércitos, su Dios, 

El libro empieza estableciendo la fecha del 520 a.C., cuando la  palabra de Dios fue enviada al pueblo que había retornado a Jerusalén, por medio de su enviado el profeta. Aunque afectaba a todo el pueblo, la palabra fue dirigida en esta etapa a los líderes; Zorobabel, el gobernador civil, y Josué, sumo sacerdote (v. 1). Ellos recibieron el mensaje dado por Dios a través de Hageo. Puede decirse de Zorobabel y de Josué que “La ley de verdad estuvo en su boca, y en sus labios no se halló iniquidad”.

Se percibe claramente el disgusto en que Dios se dirige al pueblo. "Este pueblo", en vez de “mi pueblo”, como en tantas otras ocasiones, denota el disgusto divino. Ahora hay reproche. Era su pueblo, pero no merecían llamarse así. El texto afirma que era el pueblo el que retenía el comienzo de las obras. Se tenían que dar por enterados que eran ellos, y nadie más, los culpables de la demora (v. 2).

En los vv. 3-6 se nombran las consecuencias de la pereza del pueblo al mandato de Señor. Dios preguntó a su pueblo, "¿Cómo pueden vivir en el lujo cuando mi casa está en ruinas?" El templo era un símbolo de la relación de Judá con Dios, sin embargo todavía permanecía sin terminar. Mientras el pueblo trabajara para sí mismo, habría escases, porque ignoraban su vida espiritual. Lo mismo nos ocurre a nosotros. Si colocamos a Dios en el primer lugar, El suplirá nuestras necesidades más profundas. Si lo colocamos en cualquier otro lugar, todos nuestros esfuerzos serán inútiles. Si nos preocupamos sólo por nuestras necesidades físicas e ignoramos la relación con Dios, esto nos llevará a la ruina.

La indulgencia egocéntrica, revelada por la pregunta retórica del profeta, demostró su hipocresía y sus prioridades equivocadas (v. 4). Los muros y los techos recubiertos de cedro eran comunes en las residencias de los ricos

En el v. 6 el profeta utiliza cinco pares de contrastes poéticos para llegar en esencia a la misma conclusión. Hageo pintó un cuadro vívido de los problemas económicos y sociales del pueblo. Su egoísmo y su falta de interés en la casa de Dios solo les habían traído mayores dificultades. Este fue también el mensaje de Salomón en Eclesiastés: "todo es vanidad".

El problema de la gente con el dinero no era que le faltara, puesto que tenían casas enmaderadas y ganaban bien (vv. 4; 6). El problema era que su dinero perdía rápidamente su valor. El efecto dañino de la inflación se veía aquí como de origen espiritual, un hecho que a menudo es ignorado hoy cuando se hacen intentos por enfrentar la inflación sin investigar las causas posibles.

En los vv. 7-11 el Señor los exhorta a trabajar, el obedecer era la situación a su grave situación. Una vez más, en la alocución, el profeta invita al pueblo a que reflexione en su proceder. Una y otra vez la expresión “Así ha dicho Jehová de los Ejércitos” resonaba en los oídos de la comunidad. Esta segunda invitación a que pensaran en sus caminos hacia posible que hayan emprendido el trabajo, pero aún tardaron 24 días en poner manos a la obra (v. 15).

El cambio brusco observado en el v. 9 parece indicar que la obediencia al llamado no fue inmediata. Esto nos lleva a considerar la ardua tarea que recayó en los líderes. Fueron tres semanas, a través de las cuales Zorobabel y Josué se la pasaban haciendo preparativos; trataban de alentar a los que no tenían fe y se sentían desilusionados, animándolos una y otra vez. Mientras Hageo sostenía a los líderes, éste recibía del Señor las fuerzas y la inspiración necesarias para no desmayar.

La alusión del monte (v. 8) parece indicar cercanía. Siendo así, la madera que hacía falta se hubiera traído de los alrededores de Jerusalén.

La complacencia del Señor sería ver al pueblo obedecer y así terminar la reedificación del templo. La presencia de un templo restaurado, con un elaborado culto, con su sistema de sacrificios, era vital. El v. 9 da a entender que el Señor, antes que respondamos, sabe qué hay dentro de nuestro corazón. Descubre que en los oyentes no había una inmediata y positiva respuesta. Por eso vuelve a la carga. Censura la desordenada búsqueda del placer y la comodidad de su pueblo.

En los vv. 10-11 se menciona la crisis económica que había venido, como resultado del rocío del verano que fue suspendido por el Señor, esto fue el precio que tuvieron que pagar por su desobediencia. El grano, el vino y el aceite eran los productos principales de la tierra. El ganado también languideció a causa de la ausencia de salubridad espiritual

En los vv. 12-15 se registra la respuesta positiva de los dirigentes y del pueblo a la petición de Dios. Otra vez se nos sitúa con precisión en el día y mes en que tenía lugar el acontecimiento: el día 24 del sexto mes, (agosto-septiembre). Algo más de tres semanas pasaron para que las palabras de Hageo tuviesen respuesta.

Habían sido palabras duras las dirigidas al remanente, y Hageo, al fin, pudo estar satisfecho del resultado de su ministerio. La voz de Dios se había dejado oír, y un reverencial temor sobrecoge a todos (v. 12).

Por primera vez a un profeta se le designa como mensajero, o “enviado de Jehová”, descripción que armoniza con la misión de estos “enviados” de Dios para ministrar al pueblo. (v. 13)

La palabra de Dios estimuló el ánimo de todos. Y como una poderosa explosión del Espíritu, el pueblo se levantaría de su postración para reiniciar las obras del templo (v. 14). Cuando Dios habla, es la misma vida de Dios la que se transmite (2Cr.15:8). Esa es la clave de todo despertar espiritual.

Cuán a menudo escuchamos un sermón y respondemos, "Ese es un punto excelente, debemos hacer eso", sólo para salir de la iglesia y olvidar que debemos actuar. Estas personas pusieron sus palabras en acción. Cuando escuchemos una prédica o una lección, pregunte qué es lo que debo hacer al respecto, y luego debemos hacer planes para ponerlo en práctica.

Comentarios

Entradas populares